Color local

Una amiga se fue de vacaciones y quedé al cuidado de su departamento y su gata. La gata divina, el departamento también. Acostumbrado a viajar mínimo dos horas por día (mi colegio estaba en Belgrano, mi trabajo es en Palermo y la Facultad en Caballito) me encontré instalado a ocho cuadras del trabajo, agradablemente calefaccionado.
Cito a Diego "hoy le dije a Javi (hice un pronostico) a ver si acierto. Despues de esta experiencia anti conurbana que tuviste va a nacer un impulso definitivo para mudarte al centro". Cuando le comenté a Mártin que había llamado a mi padre para pedirle la garantía para mudarme, enfocó todo su pesimismo en los números que hice y demostró que no se sostienen por su cuenta. Además de la cuestión teórica, obviamente: "digo... nada, yo sé q soy el más pequeño burgués del mundo, y q casi no podría relegar nada por irme a vivir solo... pero, vos no sos igual?".
Mi familia es rara, tengo un hermano piquetero que puede vivir con un peso por día (y le sobra) y un hermano barman que trabaja esporadicamente y no sé de qué vive, de aire. Soy el único que terminó el colegio y empezó a trabajar dos semanas después y no dejó de hacerlo desde entonces. No es especialmente bueno porque nunca hice ahorros. me dediqué a gastar cada centavo. Mi madre está entusiasmadísima con la idea de que me vaya, pero no pudo prometer un monto fijo mensual. Parole, parole.
Una vez, conversando con una tía abuela fervientemente antiperonista, me dijo que su primera casa se la había comprado con un préstamo de Evita.¿Me va a tocar decir que me compré mi primera casa con un préstamo de Cristina?

3 comentarios:

Ana Banana dijo...

No hace mucho soñé que apoyaba su candidatura y, parte de la campaña, era acompañarla a los mtv awards en Los Ángeles. Potras ambas en la red carpet, saludábamos a Joan Rivers para E! Después me desperté. Y a parte de preguntarme cómo pasé tan rápido de una alfombra roja a Belgrano, no logré entender por qué soñé que apoyaba su candidatura. Weird.

Anónimo dijo...

Eso. Y una Singer siglo XXI.

(al margen, después hacemos bien números).

Lucía dijo...

de una ocupa a otro...
vivir la experiencia de estar solo por una cantidad finita de tiempo permite que la necesidad de independencia hogareña se reduzca a cero.
y eso es genial, porque yo tampoco tengo un peso...

MA! HACEME LOS RAVIOLES PARA EL VIERNES QUE VIENE QUE VUELVO A CASA!

PD: el otro día fui a buscar ropa a casa y mi mamá había hecho salmón con no se que cosas, una delicia. Cual muerta de hambre, sin impunidad alguna, tomé un taper, metí lo que sería mi porción si hubiese estado parando en casa y me fui, para comer acompañada de mi adultes temporaria.